lunes, 19 de agosto de 2013

viernes, 6 de abril de 2012

tres poetas diferentes unidos por la tierra imaginaria, para el Neoberraco expansivo.


Dos poemas del poeta Colombiano Raúl Henao

El silencio

¡Aire sonámbulo, blancura de las rosas!

¿Quién menciona la abeja

En el avinagrado

Corazón de la noche?

El sueño no es más alado

Que esta vigilia

Acertijo y pabilo

Ceguera y deslumbramiento

A mis palabras el silencio pone alas.

Pensamiento de la muerte

El mundo afuera

Es la hermosura

De una flor.

Mi pensamiento

El interior de la flor.

¿Me preguntan acaso

Si morir

Es caer al interior

De la flor,

Y florecer

A cambio de pensar?

El poeta colombiano Raúl Henao, Cali, 1944. Poeta Surrealista. Publicamos dos poemas seleccionados por el jurado neoberraco para la muestra, extractados de su libro SOL NEGRO, 1985. Foto del festival de poesía.

El poeta Carlos Enrique Ortiz, posa para el Trío de la amistad junto a Elmer Restrepo y Gabriel Jaime Caro (Gajaka). Foto de Fernando Benitez para el video de Oscar Mario Estrada "La elegía del poeta hermético, 2011.

Poemas inéditos del libro “Adarve”

Carlos Enrique Ortiz

A la casa de niebla
la habita un corazón
de horas ateridas

A la casa de niebla
la deshace este viento
tan pequeño
la sumerge esta lluvia
tan dispersa
la devora este fuego invisible

A la casa de niebla
la borra el sol,
con su soplo de luz
la mantiene en secreto
con el calor de su desespero
la funde en la nada

Pero, en la noche de hielo
es alí donde canta
la luz de las estrellas.

NUNCA


Tu, como el tiempo
viniste
y arrojaste a la nada
lo que fuí para ti

Tu, como el tiempo
permanencia y fuga
verdad y engaño..
En la oscuridad de tu ser
la luz de mi sangre se ahogó

Tu, como el tiempo
un disfraz de la muerte,
boca que devora
a quien la besa

Tu, nunca
porque el alma implacable de la espada
sólo obedece su propia sed.

Los pasos que dimos serán viento
nuestras miradas

luz en el vacío

Ya no ser
no estar en parte alguna
haber sido...

En la inmensidad misteriosa del tiempo
no hace diferencia

Camina, mira, se
es la hora en que el sol
palpita contigo
y te da tiempo


Poemas inéditos del poeta barranquillero, Mario José Cervantes M. para la muestra de selección de poemas para el blog del neoberraco.


INTERIORES

I

Como si quisiera quitarse algo de encima. Se levantó de la cama y fue a bañarse. Unas pisadas se aproximaron pero no tuvo el valor de sostener la mirada. Sintió vergüenza por aquel cuerpo. Y vergüenza consigo mismo.

II

Lo miró restregándose bajo la ducha. Ojalá permitiera dejarse amar. Ojalá entre otras tantas cosas. Ojalá siempre. Ojalá.

UN MURO

Entre tú y yo un muro. Tan alto, tan infranqueable. Y trato pero mis puños no alcanzan. Ojalá pudieran mis palabras.

EL MIEDO

Nos rodea: lo respiramos. Al desayuno, al almuerzo, a la cena: lo comemos y bebemos. Adondequiera nos acompaña: ha llegado a convertirse en nuestra sombra. Nos espía hasta en sueños. E, inclusive, copulando. Nos rodea el miedo: lo respiramos.

OTRA MINIATURA PARA LEWIS CARROLL

I

Hay quienes se enamoran de los gatos. En especial de alguno de Cheshire. Pero no todo el mundo es como Alicia la Prudente. Y se acercan demasiado.

II

Alguien cae bajo un embrujo. Y va por las calles como un sonámbulo. Tras una sonrisa.

UN NÚMERO EN ESPECIAL

En un bosque de piernas se traba el balón. Y entre los once un número distingo en especial. Esa espalda la reconocería inclusive con los ojos cerrados. Como cuando voy a tientas por el cuarto en busca de su aliento. Me sorprende entonces un grito. Y en mitad de la cancha lo veo arrodillarse rodeado de piernas. Ojalá pudiera ir hasta allá. Y abrazarlo y decir cuán orgulloso estoy. Y cuánto lo amo.







sábado, 14 de enero de 2012

Discurso de Jauna la loca desde Tordesillas con la noche de la luna como naranja agria.

Discurso de Juana la loca (de Trastámara) a las colonias y a los feudalistas y, anarquistas de América.

Apostando con su tarot de Aquiles a los Mamelucos, sin mucha erudición, la marca monstruosa e indivisible de su visiónaria desnudez y despojo.

Primero

Pasan los años de la fajazón y gobiernan los predestinados. Las más of arriba, y el más of también. Pero las boricuas serán las más bellas.

Ni se te ocurra nombrarla de primero, qué? … Harán fila para mi y bailarán Salsa primero que todo. Que inquisición a los pobres artistas de hoy. Si, solo Nilda del país de la música suave del 6 de la calle Sebastián, con sus vestidos de miss universo en una caja fuerte por todo San Juan con el carro metafísico (esta vez con Cesaria Evora).

Ah, un happyness, el bermejo Otello por fin sale silbando en un filme de Genet, increíble escuela. El porte muy real aunque sea hijo de Fidel, esa pelea por los lentes oscuros, lo feo del hombre y el gesto de que te voy a comer.

Son las 20 mil, si, las 22.000. Muy redondo la pelea de dos estrellas de Hollywood en la calle, el uno comunista y la otra despatriada, en el 2011!

Nos alejamos con la droga, no sé si hacia adelante o hacia atrás por caridad remota. Y admiramos el coraje de: tú te alejas. Pero tranquilos hubo otros nombres para la memoria, Jerry Berger, sí, y si se pierde por dos horas y media comenzando la noche, y en esas llegas y no reconoces a los dioses que están a tu alrededor, y te flecharán después.

Como reía, no te burles no te canses, ahí el punto negro de un Gran pintor del siglo 15. Un fuerte impacto y se llega al mismo momento de la otra para decir en coro: no existes. Tampoco existe lo que queremos hacer.

Aprendan ellas a escribir aunque no hablen.

Segundo

El discurso para decir yo estuve allí, está reggio, no tiene nada de extra aunque si es extramitico es otra cosa, guárdese el devuelto.

Si Iñárritu, que falta de perennidad en las aseveraciones, se pasan de la raya, son casi invisibles y se creen la quinta esencia, diría otra vez yo que toco saxo.

Si, no existes, y menos doble, hasta en las mejores familias, los Eboli, los chiquitines que vienen de Trajano. La causa no es de un loco sino de un pichón de santandereano, que se ha ahogado por todas partes, que viajó con la bufanda de Alain Delón por los mejores salones de la corte de Navarra, la cocida por un bébrice del Olimpo de Zeus con Heracles.

La buena, no podemos hacer Shakespeare con Juana la mía la diáfana la Monalisa, si apenas la tenemos parada con sus aguas de Borgoña, y el pañuelo de Gante de semejante trata de esclavas africanas. Que a veces se le seca la piel por completo de las picaduras de inseptps negros con punticos amarillos. La moda de el “Honor de los Prizzi”.

Estalla la risa copiada, reverberada, vete a a leer chamizo.

Tercero

Copiada, copiada, clonada, mi Primer Grammy de loca preñada para un rey enano absurdo y feo. No hay uno ni dos son mitades, solo tres, que día sin número, cuándo es tres?

Le conté a Carlos V que las corbatas más caras salían de Harvard, y no entendió nada, la ceja peluda por el pasadizo, muy romántico, con el arma automática, sin el Portero de los monstruos. Solo en tiempos de paz se refuerzan los fundamentalismos. Que tal el “pereque” de tenerlos como una forma de uranio descabellado.

Cuarto

Hasta que se olvida cerrar la bragueta, y está perdido, ante una página de un libro concurrida por los Buendía. Todavía puede tener su matrimonio con la diferencia de 60-20, “de cierta manera”, hasta que la muerte nos separe , y le creamos la mentira a nuestro maestro neofascista sentado en el corredor fulminante mientras llega la que es con un cigarro desconocido en su boca. La contractual o frontal acto de hipertensión de cómodas vigilias de ancestros policromados.

Los temblores están de moda; no se el enclave o la profundidad de este barranquito o iluminatis. Es como la grandeza de una taza de porcelana de un extramítico, gigante como una gallina culeca. Una pieza de porcelana querrás decir mientras ganamos espacio con la guerra de los diablitos vestidos de blanco por entre los espejos convexos.

Trataré de empezar con límites expuestos contra puertas de naves espaciales. Camina el monstruo o la vieja pieza de cámara del Rey Luwig. El vaso de vino ahora lo tiene Alejandra Pizarnik. Me ahoga el Este por donde vienes tú, muy sicoanalista con el cucho. El poeta de Aquiles.

Quinto

Si, el poeta de Aquiles, con su mismo problema, el talón, pero con su fuego encendido por si las moscas dejan transformar al niñito en tubo de Laboratorio u en Hermesfrodita, afrodisiaco for ever. Dionisíaco, tiresioso, amante de las musas desoladas con su encuadre imposible para un hacedor con su cuadrante hemisférico, la mujer barbuda que ríe en el circo olímpico.

Juana la chiquita, la mamona con su príncipe asburgo, jugando con el futuro que se habían encontrado los reyes de Castilla y Aragón, no así los de Navarra pasados todos a cuchillo cada que le daba la gana a los católicos redomables. Semejante apocalipsis raro que se repita, a pesar de las bandas de criminales que dicen pertenecer al diablo o a la mano derecha de Jehovah, el justiciero.

Sexto

Mucha carne o fibra dentro de ese cuerpecito sometido a la Sodoma, en la imaginería popular, que no tenía alcances si el Rey se metía el dedo por la boca para poder comerse los 100 banquetes del día, y esto duraba años, mientras Fray Luis de León preparaba la defensa de los heréticos en la santa inquisición.

Mientras los piratas se robaban el tesoro de Atahualpa, el rey saqueador de Roma, hijo de la Juana, mandaba a cazar a todos los faisanes de Europa, muy pocos quedaban para la codicia hechizada del poeta Lezama Lima, 4 siglos después. Los 100 caballos del monarca recorrieron millones de millas en todo su reinado de Terror con un poco de elogios a sus victorias al mejor estilo de Carlomagno, el chimberito mayor.

Séptimo

Os veís de oro en la batalla, salís medio muertos y dispuestos a hacer el informe para la Reina madre, aunque sea en una novela de caballería, os creo país vasco y media melcocha castellana, y aplazo bañarme en la Costa brava por la insana característica pública de mi absoluta indeterminación apara alcanzar el solio con una espada o peor aun con un machete de Extremadura. Guardarme el secreto, nos hay sino en el pecado griticos y mamelucos bipolares.

Gabriel Jaime Caro (Gajaka)

miércoles, 21 de enero de 2009

Mi churrunguis tunguis: A propósito de la poesía y Barack Obama

Mi churrunguis tunguis: A propósito de la poesía y Barack Obama

Dos poemas inéditos de Carlos Enrique Ortiz

Estoy hecho de tiempo
de días que agonizan en la sombra
de noches que se ahondan en la nada.

Estoy hecho de ti
de tu deseo
guardián de tu sonrisa
rehén de tu mirada
soy la sombra que acompaña tus pasos
soy las manos donde brotan caricias
soy los ojos que atesoran tu rostro
pensamiento donde reina tu vida.

Estoy hecho de ti
de tu rechazo
de la espera de piedra
del frío de la ausencia
del roce de la muerte que me aguarda
del olvido de las horas felices
del silencio al que sentencias mi amor
del no que me regalas.


PERSONAJES

Sin mirar nunca el riesgo
a la cara
apoltronados en la propia conveniencia
sospechando de todos
sin contender con nadie,
tomándolo todo sin dar nada
y finalmente en acuerdo con lo peor.

Siempre a la sombra del poder
deshaciéndose en halagos
comprando la gloria con la integridad
recibiendo la herencia
calculando el amor
hediendo en mil festejos
trepando hasta el fondo…

Son los señores de la astucia;
ebrios de sí mismos
hablan de sobriedad,
con la barriga siempre llena
escriben de inanición,
con la bolsa siempre llena
alaban el gasto.

Eternamente a salvo
Juzgan desde las sombras,
secos y estériles reproducen sus miedos
trompetean su exquisita impotencia,
en una niebla de palabras y con el corazón muerto
fabrican la página oscura
de su propia importancia.

Funcionarios de muerte
quieren que la intensidad de la vida
los bendiga.

2009

lunes, 19 de enero de 2009

A propósito de la poesía y Barack Obama

Cuarenta acres: un poema para Barack Obama
Derek Walcott
Versión de León Félix Batista


Emerge un emblema del tumulto, un grabado:
un joven negro al alba con sombrero de paja y overol,
un emblema de imposible profecía, muchedumbre
dividiéndose como el surco arado por una mula,
separándose para su presidente: un campo de algodón
nevado
de cuarenta acres de extensión, de cuervos con presagios predecibles
que el joven labrador desdeña por sus memorables
ancestros de cabellos de algodón, mientras, alineada en una rama, hay
una tensa
corte de búhos con gafas y, en el borde lejano
del campo,
un espantapájaros burlón apunta hacia él con rabia.
El pequeño arado continúa en esta página con líneas
más allá de la tierra quejumbrosa, el árbol del linchamiento, la venganza negra del tornado,
y el joven labrador siente el cambio en sus venas,
corazón, músculos, tendones,
hasta que la tierra yace abierta como una bandera cuando la firme
luz del alba raya el campo y los surcos esperan al sembrador.

__________________________________________

Forty Acres: a poem for Barack Obama
Derek Walcott

Out of the turmoil emerges one emblem, an engraving —
a young Negro at dawn in straw hat and overalls,
an emblem of impossible prophecy, a crowd
dividing like the furrow which a mule has ploughed,
parting for their president: a field of snow-flecked
cotton
forty acres wide, of crows with predictable omens
that the young ploughman ignores for his unforgotten
cotton-haired ancestors, while lined on one branch, is
a tense
court of bespectacled owls and, on the field's
receding rim —
a gesticulating scarecrow stamping with rage at him.
The small plough continues on this lined page
beyond the moaning ground, the lynching tree, the tornado's
black vengeance,
and the young ploughman feels the change in his veins,
heart, muscles, tendons,
till the land lies open like a flag as dawn's sure
light streaks the field and furrows wait for the sower.

NOTAS:
- Al terminar la Guerra Civil norteamericana, el Congreso norteamericano decidió, ante la imposibilidad de hacerse cargo de su manutención de manera indefinida, que todo esclavo liberado que fuera jefe de familia tenía derecho a recibir cuarenta acres –16 hectáreas– de tierra cultivable y una mula para comenzar su nueva vida. Estos terrenos provenían de los abandonados por los confederados a causa de la guerra. Esta iniciativa da nombre al poema. La invocación a la emancipación de los negros y la ruptura que significa el triunfo de Obama quedan así relacionadas.
- El nombre de su productora fílmica de cineasta negro Spike Lee (40 Acres and a Mule.), proviene de la misma historia. E. L. Doctorow (Nueva York, 1931) cuenta en su más reciente novela, “The March” (2005), esa zona de la Guerra de Secesión que dio origen al episodio de la asignación de los 40 acres y la mula. La novela fue publicada en español por Roca Editorial como “La gran marcha” (Barcelona 2006), en traducción de Isabel Ferrer y Carlos Milla, y obtuvo el III Premio Internacional de Novela Histórica “Ciudad de Zaragoza”.
- Walcott dijo que el título original del texto era "Forty Acres and Fifty States" (Cuarenta acres y Cincuenta Estados), pero decidió que era demasiado largo y lo acortó.

-El texto original está escrito con una rima particular del poeta, que le permite fluir magníficamente. En nuestra versión al español no podemos reproducir esta característica.

- La “corte de búhos con gafas” (court of bespectacled owls) del poema se refiere a los jueces de la Suprema Corte.

- Confieso que traduje el grueso del poema en 10 minutos, pero que me estanqué terriblemente en el verso que reza: “a field of snow-flecked cotton forty acres wide”. La razón: el adjetivo compuesto “snow-flecked”, que descompuesto en “snow” (nieve) y “fleck(ed)” (marca, punto, mancha), no me proveía de ningún adjetivo en nuestro idioma. Consulté la traducción al español del poema “Orígenes e historia de la conciencia” de Adrienne Rich, que usa el mismo adjetivo, y el traductor (anónimo) lo resolvió como “vareteado”, de “vareta”, sustantivo femenino de “vara” (swimming under the snow-flecked surface of the pool, que nada bajo la superficie vareteada de nieve). Otros traductores de este mismo poema de Walcott se inclinaron por “nevado”, que fue, aunque insatisfecho, la solución que escogí también (nevado es, sin duda, “snowy”, “of snow”). “Snow fleck” se utiliza a veces para referirse metafóricamente al polvo blanco que cubre ciertos bizcochos, o a la nieve ficticia en los adornos navideños. Pero sospecho que “snow-flecked” (con guión incluido) podría hacer referencia al fenómeno de la llamada “nieve penitente” (“a spike or pillar of compacted snow, firn or glacier ice, caused by differential melting and evaporation”, es decir, “nieve que va formando conos tipo monjes capuchinos y endurecida a hielo”), puesto que una línea antes se habla de “muchedumbre” (crowd) y, según se verá en las imágenes que anexo aquí, la nieve penitente semeja personas de pie. Esto también me acercaría a la traducción anónima de “snow-flecked” por “vareteado”. En fin, que me habría encantado traducir este verso como “un campo de algodón de nieve penitente de cuarenta acres de extensión”, pero habría prolongado peligrosamente la eufonía. Espero no haberme equivocado. Y si así fue, pido perdón, ante los pies de mis lectores, de manera penitente.